¿CÓMO LLEGO AL EQUILIBRIO?

¿Sabes que te equilibra? O debería preguntar ¿Sabes el momento exacto en que te sales de tu centro y dejas que todo te afecte?

Para saberlo deben pasar varias cosas:

1. Debes estar consciente, es decir, vivir en el presente, 2. Debes saber con certeza que necesita tu alma para sentirse plena y 3. Debes tener el carácter para manifestar (materializar) lo que te nutre el alma.

Si no pasan estas tres cosas en tu vida siempre estarás en una lucha constante.
Avanzas y retrocedes, avanzas y retrocedes, ¿Cuánta energía y vida crees que pierdes en esta lucha? Y ¿Cuántas personas, oportunidades y momentos crees que dejas atrás por no saberlo?

Ahora bien, miremos cada uno de estos aspectos por separado.
1. Estar en el aquí y el ahora, sé que es difícil, mientras estás en casa con tu familia, estás pensando en la camioneta último modelo que quieres comprarte, o de dónde sacarás el dinero para pagar la universidad de tus hijos, o tu mente está reviviendo momentos del ayer y te estás preguntando, ¿Dónde estaría ahora con mi familia sino hubiera engañado a mi espos@?, ¿Sería más feliz de lo que soy en este instante? Y con tu mente en esos momentos, dejas de ver que llevas un buen rato con tu pareja y no te has percatado de que está a tu lado…así es como nos pasamos la vida, fuera del momento actual.

Experimentas la separación del cuerpo y la mente y si hay separación no existes como unidad. Te estás perdiendo de ti mismo.

2. Y ¿Sabes que te hace sentirte pleno? Te has dado cuenta que con el dinero compraste tu casa soñada, pero ahora sufres porque la deuda siempre es una necesidad que te agobia, o te vas de viernes en la noche y crees que con licor y amigos eres feliz, hasta que llegas al otro día y sientes el vacío, quizás de la soledad o el remordimiento de haber hecho o dicho algo que no debías, para finalmente concluir que eso tampoco te hace feliz o te da plenitud.

Finalmente no has logrado identificar qué es eso que te da paz y sigues buscando entre actividades y consejos que te venden en las redes sociales, sin éxito alguno.
3. Y como aún desconoces lo que te llena, no tienes la fuerza, la energía ni la voluntad para manifestar algo que desconoces y el ciclo continua, así se va yendo la vida entre tus manos.

Entonces ¿Qué hacer? Que tal si aprendes a vivir partiendo el día en pedazos, es decir, si tienes una reunion laboral, estar al 100% presente, luego estás almorzando con tu pareja y decides que no hay nada más, solo ese momento, no hay futuro ni pasado, solo tu y ella o llega tu hijo a preguntarte algo, cierra inmediatamente las líneas de tiempo que no se llamen presente y quédate con él. Eso es estar en el aquí y el ahora, te puedo asegurar que el poder que empiezas a desarrollar hará que manifiestes con mayor facilidad lo que deseas.

En cuanto a saber que te da plenitud, sé consciente que te has pasado la vida repitiendo las mismas actividades de siempre ni siquiera te has sentado a reflexionar si hay algo diferente que hacer, si hay algo nuevo que de pronto encuentras bastante satisfactorio y placentero, aunque se salga de lo acostumbrado.

Que tal si exploras actividades diferentes y comienzas a descubrir nuevos intereses, ¿Sabes que pasará cuando descubras que algo nuevo te trae paz o placer verdadero? Empezarás a darle prioridad a tus deseos, no aquellos superficiales que solo te agotan sino a aquellos que te llenan de energía, creatividad y placer.

Tu voluntad se fortalecerá y comenzarás a cambiar tu vida, no influenciado por el exterior sino por el fuerte deseo de ponerte en primer lugar de importancia y cuando llegas a ese punto, estarás creando un nuevo estilo de vida. Uno realmente en conexión con tu alma en equilibrio.