TUS PARADIGMAS SOBRE LA EDUCACIÓN

Lo que leerás a continuación muy seguramente irá en contra de lo que hasta ahora has considerado como la única vía de desarrollo profesional, así que deberás decidir si continuar leyendo y descubrir una postura diferente, sin sentirte amenazado, o ignorar este primer párrafo para continuar en tu zona de confort. ¿Qué eliges?

El sistema educativo sigue siendo, hoy en día, un entrenamiento para eliminar el pensamiento creativo de nuestros niños y jóvenes, y desde la era industrial, continúa estableciendo mecanismos para solo elevar los estándares de pensamiento lineal, dejando por fuera toda oportunidad de desarrollar y fortalecer las habilidades naturales de creatividad y respuesta frente a las diversas situaciones del ser humano.

Su propósito no es más que sostener un sistema que movilice a las masas en la misma dirección, una sociedad que cumple fielmente parámetros de competencia laboral de poca iniciativa promoviendo valores que se encuentran lejos de estar alineados con la esencia del Ser, logrando así desviar su atención en su verdadero potencial humano.

Desde temprana edad se le promueve al joven enfocarse en la oportunidad laboral del momento, los sectores que mejores ofertas económicas tienen, la viabilidad laboral, continuar el legado familiar justificando la facilidad en el proceso, mantener el status quo para continuar disfrutando el estilo de vida que se lleva y me quedo corta con la cantidad de argumentos que hoy se manifiestan.

Difícilmente los jóvenes puedes salirse de la influencia de estos argumentos, ya que están en la búsqueda e incertidumbre de lo que realmente desean y esta situación los hace vulnerables e inseguros frente a la toma de decisiones, pero ¿y si eleváramos nuestro nivel de consciencia, eliminando nuestro ego, y frente al miedo al futuro, promoviéramos la observación temprana del potencial de nuestros niños facilitándole los medios para desarrollar su creatividad y sus destrezas y guiáramos sus pasos para convertirnos en un faro que guie su camino y de esta manera fortalecer en ellos su confianza para que sean ellos quienes decidan sobre su futuro?

Ser padres, tutores, mentores exige una consciencia mayor, una responsabilidad que va más allá de un rol proveedor de recursos, cuando se llegue a esta consciencia podremos restructurar el sistema educativo actual para que se convierta no en un productor en masa de pensamiento lineal, sino en un campo de experimentación que provea los recursos y el hábitat para que cada estudiante descubra su verdadero potencial y por consecuencia recorra un camino que le asegure su felicidad mientras desarrolla su propósito de vida.